Madrid.- A veces la realidad supera la ficción, por desgracia, muchas veces. En esta ocasión, un hombre y su hijo decidieron usar una treta exagerada para no cumplir con el compromiso que habían adquirido con una pareja de novios. Se comprometieron a realizar su banquete de bodas pero les estafaron. La excusa que les dieron: habían muerto.

Por ello, la Fiscalía Provincial de Madrid solicita 20 meses de prisión para Jesús Campos Rodríguez y para su hijo Yeray Campos por un delito de estafa y reclama para los afectados una indemnización de 1.500 euros por los perjuicios causados.

Padre e hijo gestionaban una empresa de bodas, Catering Modena. Concertaron el 25 de julio con los familiares de los novios prestar un servicio de catering en una boda que se iba a celebrar el 5 de septiembre de 2015 por un importe de 1.980 euros, IVA incluido.

Los novios, según lo acordado, realizaron dos ingresos en una cuenta corriente abierta por Yerai Campos, en la que también aparecía autorizado su padre, por valor de 1.500 euros.

Según relata el fiscal, los dos acusados obraron en todo momento “a sabiendas de que no iban a realizar el servicio y que se iban a apoderar del dinero”. Es más, llegaron a comunicar a los denunciantes que tanto el dueño de la empresa de catering como su hijo habían fallecido para eludir el compromiso adquirido meses antes, “hecho que posteriormente resultó acreditado que era falso”.

Jesús Campos ya tenía antecedentes penales previos por un delito de apropiación indebida condenado por un juzgado de Móstoles. En esta ocasión, su treta fue más allá y no sólo estafó el dinero de una pareja, arruinó el día que, para muchos, es uno de los más felices de su vida. El juicio por esta causa se celebrará el próximo día 28 de junio.